miércoles, octubre 16, 2013

Entiendo

Ya lo entiendo.
Reconozco cómo es todo.
Solo las novelas tristes
con un desenlace vehemente
reflejan los momentos más reales y abandonados de la existencia.
La vida mediocre de los que todo aseguran
no coincide
con la vida intensa de los que todo pierden.
Y eso es entender
saber que nada es efímero pero menos eterno
que solo la memoria trasciende para dar sentido a los momentos
hasta la muerte
muerte que es de uno y no de ellos.

Desde ahora me esperan no sé cuántas horas
cuántos hechos
cuántos lugares
cuántas mujeres
cuántos hombres
pero sé que cuando los tenga y los pierda
los trascenderé.
Si algo se tiene es porque no se tuvo
y no se tendrá.

Y entiendo cómo es todo.
Y ese es otro y nuevo final de una de mis tantas novelas tristes:
te voy a perder
yo ya te estoy perdiendo.
¿Te voy a perder si nunca te tuve?
y si se pierde lo que nunca se tuvo la memoria no trasciende.
Solo trascenderá la esperanza ajusticiada
perdida
de la mediocridad que nunca se aseguró
ni se asegurará.

Y entiendo
que he elegido una vida casi intensa.